En estos tiempos de confinamiento, la grandeza de espíritu aparece en forma de regalo, de pensamiento redactado para esas almas viajeras que somos.
REGALOS DE ALMAS VIAJERAS
Estos tiempos de confinamiento a los que nos está obligando la pandemia del Covid19 están trayendo muchos momentos trágicos, muchos instantes de desesperación, de ansiedad, de tristeza, de lágrimas empáticas por las pérdidas de familiares directos de algunos amigos, clientes, y personas de nuestro entorno. Momentos de incerteza por nuestro futuro, de confusión por un panorama para el que nadie estábamos preparados.
Pero estos mismos tiempos que vivimos están activando resortes internos que teníamos aletargados, capacidades para crear y re-crear las mejores versiones de nosotros mismos.
Y de repente una mañana notas que sobre la famosa app de mensajería instantánea tienes la bolita roja con un 1, señal que alguien te ha hablado. Y ese alguien es una de esas personas que solo al ver que tienes un mensaje suyo se te pone una sonrisa en la cara. Una de esas personas que estimas más allá del tiempo que haya pasado sin abrazarnos físicamente. Un alma viajera, con el que has compartido camino, una persona que deambula por la vida regalando música, regalando sueños, regalando poesía (últimamente en forma de Haikus), regalando vitalidad y esperanza.
Abro el mensaje y leo un escueto «no sé porqué, pero se me ha ocurrido este texto para tí». Y el corazón se llena de calor y alegría porque tu amigo te ha dedicado un pensamiento con esta belleza:
«Los viajes comienzan desde lo más profundo de nosotros y se trasladan hacia fuera.
Llegan hasta los dedos que quieren tocar lo que están viendo. Tocar y guardarlo, guardarlo en nuestros ojos.
Viajando somos aves migratorias que intentan buscar otro lugar, otro nido donde vivir y atesorar nuestros sueños. Nuestras alas buscan trozos de cielo más amplios para que se expanda aquello que llevamos dentro, con el anhelo de mejorar lo que hay fuera.
El regreso llena de viento el nido.
¿Qué si no serían los viajes sino buscar el origen de nuestros pasos?
Los viajes son preguntas sin querer respuestas».
Y de la emoción y del profundo agradecimiento hemos preparado este vídeo para poder compartir este regalo, para dejarnos llevar por la capacidad de Enrique Linares, Kike, para insuflar esperanza, para seguir haciéndonos soñar y avivar nuestras almas viajeras. GRACIAS Kike.
Esperamos que os guste, y si así es dadle difusión para que sigamos soñando todos, ahora en tiempos de confinamiento.
Podéis seguir algunas de las creaciones de Enrique Linares en la Revista digital, que edita junto a otros grandes amantes del Haiku en España, HOJAS EN LA ACERA. Seguidla porque merece la pena.